Seguro que no te viene de nuevo. Empezamos septiembre. Nuevo curso. Nueva vida. O eso pretendemos.
Nos imprimimos las hojas para planificarnos mejor, vamos a comprar libretas nuevas, bolis, agendas, planificadores semanales, mensuales, anuales, etc…
Y entre ellos aparece ese que dice… Menú semanal, lista de la compra, despensa…etc
Pues sí. Estaría genial poder hacer una buena planificación de la alimentación. Pero ¿Por dónde empiezo?
Otro pensamiento que va junto es… Osti, pero también molaría hacer deporte, caminar aunque sea, ya se sabe, cuerpo sano-mente sana… o más o menos eso.
Pero no siempre es fácil. No. Porque en medio de la planificación, objetivos (que a veces son gigantes en lugar de pequeñitos para ir creciendo) estamos nosotras. Con nuestras tareas, emociones y falta muchas veces de tiempo para poder llevarlo todo a cabo de forma tranquila, digamos…sin estrés.
Pues hoy voy a pedirte un acto de fe. Hazlo. Sin pensar mucho.
Ten todo a mano, que no desordenado. Parece una obviedad, pero si no lo tienes delante probablemente el día a día hará que sigas con tus hábitos de siempre.
Vamos a hacer una cosa:
- Imprime una hoja de menú, semanal o mensual como te guste más.
- Haz una lista de alimentos que os gustan en casa.
- Utiliza esa base de alimentos para poner el menú con la receta si procede de cada día.
Si es la primera vez que te pones a hacer esto, no te lies con recetas nuevas si no tienes tiempo, utiliza todas las que ya conoces, o cocina de forma sencilla, para empezar luego ya introducirás más cosas.
Para esto tendrás que dedicar quizá 1h de tu tiempo, pero merecerá la pena. Sobre todo si tienes niños pequeños.
De verdad, haz la prueba. Ponte a ello. Sólo esto. Y cuéntame de aquí a un mes cómo ha mejorado la calidad de tu/vuestra alimentación y hasta cuánto habéis ahorrado al ir a comprar.
Abrazos,
Gema
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“Cuidados básicos de salud cuerpo -mente”
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