¿Una alimentación natural nos protege de intoxicaciones?
Pues bien, en gran medida sí.
Las carnes, los pescados, el marisco, la fruta, la verdura… todo fresco son alimentos aparentemente sanos.
Obviamos que las carnes pueden contener residuos de hormonas finalizadoras y de antibióticos, que el pescado y marisco pueden tener restos de metales pesados, antibióticos y de pesticidas vertidos en el mar. Las frutas y verduras, trazas de metales pesados y nitratos de los abonos químicos, que el organismo convierte en nitrosaminas potencialmente cancerígenas.
La contaminación está en todas partes. Muchos tóxicos son ambientales gracias a las chimeneas de la industria que se precipitan con las lluvias y que se filtran por el subsuelo.
Entonces a pesar de que comamos ecológico hay factores que no podemos controlar.
Aún así, mi recomendación es siempre comer de cultivo ecológico ya que evitamos muchos de los tóxicos que se nos depositan en nuestro cuerpo y que si no controlamos a la larga nos producirán un estado de malestar o incluso enfermedad.
Yo confío plenamente en la capacidad del ser humano en limpiar su organismo. Poseemos sistemas muy inteligentes que si cuidamos nos responderán muy bien.
Mi recomendación es también fomentar el consumo de la proteína vegetal evitando así tanto producto animal. Tenemos grandes variedades como para tener que comer siempre lo mismo.
Por eso, yo creo que es importante para ir preservando nuestra salud la práctica de un ayuno aunque sea una vez al año. Nos depura, con lo que te sientes “más limpio y ligero”, te sientes mejor, tu descanso se favorece y se aclaran muchas cosas, potenciamos nuestro sistema inmune tan importante para esos tóxicos que no podemos controlar. Además de que te facilita el inicio a una alimentación equilibrada y sana. Es como un borrón y cuenta nueva.
Te animo a que te plantees algo que se adapte a ti, a tus necesidades.
¡Que tengas un feliz día!
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